de la mano de sose fuamoli y a través de the au review -que de tiempo sin aparecer por este blog- nos llega la reseña, larga de narices, de la tercera actuación de deep sea arcade dentro del granite city tour, que tuvo lugar en el unibar de adelaide. tengo una galería muy buena de esta actuación, pero ya no confío en poder traerla al blog, así que me serviré de las fotos que he encontrado en instagram y si más adelante me dan permiso pues mejor.
deep sea arcade están esta noche en adelaide como parte de su granite city tour, y voy a admitir que estaba un poco nerviosa acerca de cuanta gente iba a ir un jueves por la noche. aunque cuando entré, swimming -uno de los teloneros- ya estaban terminando, había una buena cantidad de personas que se habían congregado bien pronto para la actuación, lo que fue una buena señal para el resto de la noche. me hice con una sidra y al parecer con uno de los últimos ejemplares del primer ep de deep sea arcade en el stand de merchandising (gracias nic!), y me apalanqué al lado de la barra mientras the bright shiny -los otros teloneros- hacían su aparición en el escenario.
la última vez que vi a deep sea arcade (o a algunos de sus miembros) nic mckenzie canalizaba su john lennon interior durante las celebraciones del cuarto aniversario de the au review en sydney. una noche de la que sólo tengo buenos recuerdos, y ver a la banda otra vez esta noche sólo hace que traer esos recuerdos de vuelta. en este punto, el número de asistentes al concierto habían crecido hasta formar un tamaño considerable dentro del unibar y no se trataba de una noche de jueves acompañado de música, habíamos ido allí especialmente para el concierto. siendo un concierto para todas las edades, estaba empezando a perder la noción de qué chicas eran menores de edad de las que simplemente llevaban una mala borrachera. pero tan pronto como la banda empezó a tocar me distrajo de todo aquello.
deep sea arcade es una banda, esta noche me he dado cuenta de ello, que una de dos, cumple tus expectativas como banda en directo o está a la altura cuando se apilan en contra de como suena su álbum. la voz de mckenzie -dice weaver, pero dudo que se refiera al bajista- se distingue cierta y únicamente, dándole a canciones como girls, don't be sorry o steam, momentos excelentes, pero noté de la gente que me rodeaba, que su presencia como líder de la banda cayó ligeramente en la escala de impresión. hay algo en el que me resulta atractivo como músico e intérprete, sin embargo no me acaba de convencer del todo incluso después de haber visto la banda un par de veces. tal vez sea el acento leve en su elocución o lo distante que fue, no estoy segura, pero en su mayor parte me di cuenta de que la gente o gritaban alabanzas o estaban entretenidos con sus móviles, levantando la cabeza de forma cortés de vez en cuando.
me encanta lo clásico, el rock psicodélico de la vieja escuela del álbum de la banda, outlands, y algunas ejecuciones de esa sensación venían principalmente de los riffs de guitarra y la tensión en la voz de mckenzie en seen no right y granite city. a pesar que no hubo bis, deep sea arcade actuó dando absolutamente todo de sí, como si el local estuviera abarrotado, algo que me impresiona independientemente de quien actúe. si nunca habéis visto a esta banda en directo, definitivamente creo que es algo que hay que hacer, musicalmente hablando, seguro que hay algo de deep sea arcade que podéis apreciar, ya se trate de las habilidades de weaver al bajo y las caras que pone o la probabilidad que una chica borracha se suba al escenario y acabe cantando a dúo con meckenzie. de una forma u otra, será entretenido.
leído lo leído estoy más que segura que sose confundió a weaver y a mckenzie a lo largo de toda su reseña así que me he permitido la licencia de cambiar sus nombres en todo momento menos al principio donde pone nic, les conozco poco pero me figuro que si uno de los dos le consiguió uno de los singles -el de don't be sorry nada menos del año 2009- este fue weaver. ah! la reseña original tiene un párrafo más, pero habla de los segundos teloneros así que me lo he saltado, tranquilamente.
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